Somos Lombok y estamos aquí

[Entrevista] Lidia Villar, Gorka Vidal e Iñaki Vidal, el equipo directivo de Lombok, nos presentan la nueva imagen de la agencia de creatividad estratégica..

“Renovarse o morir” no es solo uno de los refranes más conocidos, también es una forma de enfrentarse a nuevos retos. En Lombok tenemos clara nuestra elección: renovarnos siempre. Y en ello hemos estado trabajando los últimos meses. Somos Lombok y tenemos ganas de gritarlo a los cuatro vientos.

Nacimos en 2006, hace ya 15 años, y todavía nos sentimos nuevos en Donostia, pero esto se va acabar pronto. Comenzamos como Lombok Design, agencia de marketing, comunicación y diseño, y nuestras señas de identidad —profesionalidad, trato cercano y confianza— nos han traído hasta aquí, aunque sin hacer demasiado ruido.

Hoy, 15 años después, queremos terminar con la discreción, queremos que sepas más sobre nosotros y que quieras formar parte de nuestra historia. Por eso, Lidia, Gorka e Iñaki te cuentan cómo se ha desarrollado este cambio de imagen, cuáles son los puntos fuertes de Lombok y muchos más detalles que no te puedes perder.

Te damos la bienvenida a Lombok, ¡estamos deseando que nos conozcas más!

“Lombok lo forman las capacidades individuales de cada una de las personas del equipo”

Se suele hablar mucho de lo buenos que son los cambios, pero no siempre es sencillo buscar la forma de seguir evolucionando, ¿cuál es el factor desencadenante o el punto en el que decidís apostar por una cambio de imagen integral?

En realidad no se trata de algo tan concreto, esta búsqueda viene de hace ya unos años. Intentábamos buscar el posicionamiento y las cualidades de Lombok haciéndonos a menudo la pregunta “¿qué somos?”. Con este cambio de imagen hemos conseguido responderla: Somos Lombok, así de sencillo y complicado a la vez. Para llegar a esta conclusión ha habido un proceso en el que hemos tratado de redescubrirnos a nosotros mismos, pero en el que también hemos contado con colaboración externa. Desde Dhemen, consultora internacional de desarrollo de proyectos, nos ayudaron a reencontrarnos con nuestra propia identidad, a vernos con otros ojos y a dar forma al mensaje que queríamos transmitir.

Podríamos decir que hemos vivido el proceso de evolución en dos fases: una primera en la que tratas de sobrevivir, de encontrar la forma de vivir de ello y no tienes demasiado tiempo para plantear una reflexión profunda, y una segunda fase en la que ya ves la necesidad de evolucionar. En nuestro caso ya habíamos dado un giro hacia el mundo digital, ya que veníamos del ámbito offline, y esta segunda fase ha sido el momento clave de crecimiento de Lombok, con un equipo consolidado y la confianza suficiente para lanzarnos.

¿Por qué era tan importante este cambio?

Como decíamos, no es nuevo, ha sido parte de un proceso, pero es verdad que durante la cuarentena empezamos a revolvernos más, a sentir más la necesidad de reenfocar nuestra imagen. Queríamos encontrar el ADN que de verdad definiera Lombok. Queríamos ver cómo podíamos encajar dentro del ecosistema de agencias que hay en Donosti, por eso, este cambio es la forma de encontrar nuestro propio lugar. Y, sin duda, está motivado por la autoexigencia, por nuestras ganas de hacer siempre el mejor trabajo posible y mostrarlo.

Después de tantos años, ¿os da pena despediros de la imagen anterior?

Sí, nos da pena, pero es una etapa. Creemos que ha cumplido su ciclo, porque ya no somos ese Lombok que empezó hace 15 años. No es un cambio radical, porque ya habíamos perdido el ‘Design’ con el que nacimos cuando vimos que no éramos un estudio de diseño al uso, queríamos darle mucho más peso al mundo online, a la planificación estratégica, etc. Como este cambio se dio de forma natural, dejar atrás la imagen anterior no es tan difícil para nosotros.

“Nos ponemos en la piel de nuestros clientes y siempre buscamos la forma de sacar el máximo partido a cada acción”

Con esta nueva imagen, acompañada de una nueva web, podemos hablar del “renacer de Lombok”, pero ¿qué os gustaría que os acompañara del antiguo Lombok en esta nueva etapa?

El equipo. Si estamos aquí es por el equipo, porque cada uno de ellos y ellas han evolucionado al mismo tiempo, se han implicado con los clientes y han crecido profesionalmente con cada proyecto. El ‘renacer’ de Lombok llega también para poner en valor y dar visibilidad el trabajo de cada una de las personas que forman parte de Lombok.

Además, nos quedamos también con todo lo que hemos aprendido, con tener la capacidad de utilizar los errores a nuestro favor y aplicar esos aprendizajes con nuevos clientes y proyectos.

Lombok está ahora mismo muy ligado al concepto de “creatividad estratégica”, ¿qué significa para vosotros y cómo se va a ver en el día a día de Lombok?

Hablamos de creatividad estratégica porque siempre empezamos todos nuestros proyectos respondiendo a un “¿para qué?” y definiendo una estrategia que nos permita acercarnos lo máximo posible a esa respuesta. A partir de ahí seguimos con la fase de creación. Hasta ahora no lo habíamos vinculado tan directamente con Lombok, pero es una unión natural, porque es nuestra forma de trabajar desde el inicio.

Si os dieran la oportunidad de elegir un nuevo proyecto para esta nueva etapa de Lombok que comienza hoy, ¿cuál sería?

No pondríamos nombre, el proyecto ideal siempre llega de la mano de un cliente que confíe en nosotros, más allá de que sea una marca más o menos conocida, con mayor o menor recorrido. Un cliente que esté abierto a propuestas y que se deje asesorar, pero que también se implique y vea que lo que hacemos lo hacemos pensando en lo mejor para su empresa, tanto como si fuera nuestra.

Se percibe que los clientes son una parte con mucho protagonismo en Lombok, entre otras cosas por la buena relación que se crea entre ambas partes, ¿qué os gustaría que dijeran las empresas que colaboran con vosotros sobre Lombok?

Que hemos cumplido sus expectativas y que la relación humana es exquisita. Lo que más nos gustaría es que perciban el valor que nosotros damos a cada trabajo, es decir, que se queden con la implicación de todo el equipo, que se den cuenta de que somos Lombok.